Jason Day y el Sodalicio: Ese no es el camino

"Porque he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra; y los enemigos del hombre serán los de su casa. El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará" 

Mateo capítulo 10, 35-39

Hace unos días, el 22 de febrero pasado, el actor y también activista en contra de la violencia en contra de la mujer, Jason Day, en un artículo de su columna en el diario La República al que tituló "Esto sí es guerra", relató a manera de crónica un incómodo episodio por el que habría atravesado cuando niño en el Markham College, previamente a su primera comunión. En el relato, Day describe una serie de actitudes que ante sus ojos de infante le resultaron extrañas y que, con los años reflexiona pudo haber sido peligroso, la probabilidad de un intento fallido de abuso por un sacerdote sodálite. Esto, al parecer en respuesta y contraste de los constantes artículos que la Agencia Católica de Informaciones ACI Prensa, agencia de noticias del ala conservadora de la iglesia y que el Sodalitium fundara en 1980, publicara en su portal, en los que atacaban las causas que el actor defiende y protagoniza en su labor social. 

Muchas personas del medio, periodistas y público en general se solidarizaron con la historia relatada, sin embargo, la noticia cobró mayor notoriedad por la iracunda respuesta brindada por el medio eclesiástico que, en vez de solidarizarse con la víctima y anunciar medidas para hallar la verdad y señalar culpabilidad en caso la hubiese, en salvaguarda de otras personas que sí han podido convertirse en víctimas de abuso, se esmeró por desprestigiar y atacar no sólo al actor sino a toda persona pública que le hiciese llegar su apoyo. "Mentiroso", "Farsante". "Pro aborto", "Activista gay" e incluso "Pro Maduro", en alusión al tan auto desprestigiado gobierno venezolano. Así mismo aseguraron que en el testimonio del activista habían incongruencias temporales y de espacio, incluso, el director de ACI Prensa, el sodálite Alejandro Bermúdez aseguró que la historia del actor era solo una invención y que ese sacerdote no existía. Así mismo en un artículo publicado por la periodista de el Comercio en ese mismo medio, Rossana Echeandia, miembro de la Asociación de María Inmaculada, asociación vinculada a la misma causa, afirmó que la parroquia donde supuestamente se habrían dado los hechos que narra el actor no había sido terminada en esa época, es decir, no existía el mentado sacerdote y ni siquiera había sido construido el recinto relatado.

"Desenmascarada su estrategia, Day optó por difamar a sus adversarios contando una extraña historia de acoso sexual del que, supuestamente, había sido víctima cuando era un niño que se preparaba para hacer la primera comunión. El acosador, dijo, era un sacerdote. Los datos que el propio Day hizo públicos, sin embargo, hacían imposible la historia: en la fecha que él señalaba, el lugar del supuesto acoso, que había descrito con lujo de detalles, ni siquiera había sido construido" 

Rossana Echeandia

artículo Jason Night

publicado en el diario El Comercio

Sin embargo, apareció el sacerdote inexistente que habría celebrado la comunión en la iglesia que aun no existía: Era el padre sodálite Luis Ferroggiaro, quien reconoció haber presidido la ceremonia y respondiendo al testimonio del actor dijo que "Jamás he incurrido en alguna actitud impropia en mi trato con personas de cualquier edad. No recuerdo que alguien se haya sentido amenazado por mi manera de proceder. Y si alguna vez así hubiese ocurrido con cualquier persona, entonces me apena mucho, y le pido disculpas".

Era pues que la carencia de un nombre para señalar al culpable de haber jugado a los dedos con él y la ligereza en los detalles evidenciaban, según el Sodalicio y allegados, la falacia y la calumnia. La crónica de un intento de seducción según la interpretación adulta de lo que vio en los ojos de infante se había convertido de pronto -en la verdad irrefutable de los sodálites y creyentes, algunos-, en una denuncia apócrifa que inventaba curas inexistentes y parroquias sin terminar con la sibilina finalidad de mellar "la buena imagen" de esa congregación católica... ¿Buena imagen? 

"Y me comienza a palpar (el sacerdote sodálite) y en una me toca cerca de mis partes privadas y es cuando reacciono y él me dice: 'Tranquilo, has pasado la prueba' y me habló de espiritualidad" 

Pedro Salinas

periodista y ex sodálite

El Sodalitium Christianae Vitae fue fundado en Lima por Luis Fernando Figari el 8 de diciembre de 1971, inspirado en la doctrina del beato Guillermo José Chaminade, en el Apostólicam actuositatem sobre el apostolado de los laicos e la encíclica Evangelii nuntiandi del papa Pablo VI, y basa sus meditaciones en el capítulo 10 del evangelio de San Mateo. En 1997 el papa Juan Pablo II aprobó el Sodalicio de Vida Cristiana como Sociedad de Vida Apostólica de Derecho Pontificio. Pese a su trabajo silencioso y de bajo perfil ha sido blanco constante, así como el Opus Dei, de varios cuestionamientos y denuncias por parte de quienes habían sido captados por ellos, jóvenes de familias acomodadas como José Enrique Escardó o Pedro Salinas, que al no soportar la metodología de adoctrinación calificada por ellos como abusos, terminaron por abandonarla. Metodología que, siguiendo al pie de la letra el evangelio de Mateo para los nuevos evangelistas, disocian a los jóvenes vulnerables captados, de sus familias y vida anterior, sometiéndolos a extremos rigores físicos y psicológicos para, según psicólogos, una sujeción y dependencia psicológica para con la congregación. Accionar muy común entre sectas radicales con rasgos fanáticos para inculcar la fe ciega y derrocar cualquier oposición o crítica dentro de ella. Por otro lado las prácticas de represión sexual practicadas en esta congregación, según declaraciones del psicoanalista Jorge Bruce en una entrevista del programa La ventana indiscreta sobre el tema, podría también ocultar prácticas de sujeción homosexual.

"Hay un sometimiento (en el Sodalicio) y una sujeción de chicos vulnerables que no están en condiciones de oponerse a esto" 

Jorge Bruce

psicoanalista

entrevista Ventana Indiscreta

En octubre del 2007, agentes de la comisaría de Alfonso Ugarte detuvieron al sodálite Daniel Bernardo Beltrán Murguía Ward, al que hallaron in fraganti en una de las habitaciones del hostal Las Palmeras, en el Centro de Lima, con un niño de 11 años. En el dormitorio se hallaron además fotografías del menor desnudo que el sodálite obtuvo a cambio de figuritas de Pokemon. En la cámara hallaron las fotos de otros dos niños en las mismas condiciones. Germán Doig, ex vicario de la organización fallecido el 13 de febrero de 2001, fue promovido en una intensa campaña por el Sodalitium para su beatificación, sin embargo en el 2011, esta campaña fue interrumpida y finalmente desestimada y retirada debido a que durante el proceso de probanza de su vida ejemplar, se hicieron públicas diversas denuncias de abuso sexual en su contra por la supuesta violación de por lo menos tres menores de edad; abusos que según Day, eran de conocimiento del Sodalitium desde tres años antes del escándalo. Así mismo, Figari, fundador de la congregación, renunció ese mismo año a la dirección espiritual del grupo alegando motivos de salud, sin embargo medios de prensa revelaron que la real causa eran otras varias denuncias de abuso sexual también en su contra. 

Si bien es cierto se han detectado en todo el mundo un gran número de casos de abuso sexual perpetrados por representantes de la iglesia afectando su imagen y su causa, y teniendo en cuenta que estos execrables hechos se dan en toda institución y ambiente sin que estas tengan necesariamente responsabilidad en estos delitos, lo cierto es que gran parte de su imagen mellada radica en la política con la que actuó frente a estos casos que, como en el caso de Day, en vez de velar por el inocente, por la víctima, se ha esmerado en cada una de las denuncias, en desprestigiar y atacar a las víctimas, y encubrir a los delincuentes paidófilos intentando sin éxito evitar el escándalo. Política que contraria no sólo a sus intereses sino a las enseñanzas de su credo, no ha servido más que para convertirse innecesariamente en cómplices, otorgarse responsabilidad en la impunidad y enardecer la indignación general de la sociedad. 

"Lo que no deja de sorprenderme es el doble discurso del catolicismo. Por un lado, los últimos dos papas nos recitan machaconamente que lo más importante es cuidar de las víctimas y castigar a los autores de estos crímenes. Sin embargo, a la primera de bastos, la reacción es feroz, pues está claro que lo más relevante no son los damnificados, sino la imagen, la reputación, el qué dirán" 

Pedro Salinas

Artículo Jason y los tontonautas

publicado en el diario La República

Hay quienes tienen dudas sobre el testimonio del actor, justas y con todo derecho, sin embargo ante la gravedad de lo escrito la primera interesada en buscar la verdad debiera haber sido la Iglesia en vez de, desde un primer momento, desestimar desde el portal y sus satélites, el testimonio y a quienes lo apoyan con epítetos, insultos y acusaciones que no vienen al caso. Más allá de la veracidad del testimonio de Jason Day, más allá de que puede haber sido un falso recuerdo, una mirada distorsionada de un niño de 9 años de lo que realmente pasó, una mala interpretación de la amical actitud de un cura, es alarmante la execrable política que aun mantiene la iglesia, de anteponer su imagen por encima de las atrocidades que pueda haber atravesado una víctima, es alarmante que aun la Iglesia no aprenda a colocarse a lado de la víctima cuando un miembro de su institución es el probable victimario, es alarmante que aun no aprenda que atacar a la víctima e intentar desprestigiarla, no favorece a su imagen y que, por el contrario, ese tipo de políticas sólo hacen daño a su institución y es la razón del alejamiento de muchos de los que los seguían y respetaban. 

Tantos años y la iglesia aun no aprende que ese no es el camino.