Las cadenas, esos infinitos mails que llegan de mano en mano que sin relevancia alguna, por lo general se pierden en el olvido, invaden la red y son muy pocos los que quedan por algún motivo. Este es un cuento infantil, con cierta ternura y creatividad; me gustó a pesar de que para los que me conocen saben el poco romanticismo del que me caracterizo y hoy tropecé de nuevo con él, pero en video, cuyo autor parece ser un locutor mexicano de mucho éxito: Mariano Osorio....
Cuentan que una vez se reunieron todos los sentimientos y cualidades del hombre.
Cuando el aburrimiento ya había bostezado por tercera vez, la locura les propuso "oigan vamos a jugar a las escondidas".; la intriga levanto la ceja y la curiosidad sin poder contenerse pregunto "escondidas?"; el entusiasmo danzó seguido de la euforia; la alegría dio tantos saltos que terminó por convencer a la duda y a la apatía que nunca se interesaban por nada.
1,2,3... comenzó a contar la locura.
La primera en esconderse fue la pereza que como siempre cayó detrás de la primera piedra del camino; la fe subió al cielo y la envidia se escondió detrás de la sombra del triunfo que por propio esfuerzo había conseguido subir a la copa mas alta del árbol mas alto. La generosidad casi no consigue esconderse porque cada lugar que encontraba le parecía maravilloso para alguno de sus amigos...
si era un lago cristalino ideal para la belleza
si era la copa del árbol perfecta para la timidez
si era una ráfaga de viento magnifico para la libertad,
así es que termino escondiéndose en un rayo de sol; el egoísmo en un lugar bueno desde el principio ventilado, cómodo pero solo para él; la mentira se escondió detrás de un arco iris
y la pasión y el deseo en el centro de los volcanes.
Cuando la locura terminaba de contar, el amor todavía no había encontrado lugar para esconderse pues todos estaban ya ocupados hasta que encontró un rosal y cariñosamente decidió esconderse entre sus flores.
Concluyo la locura y comenzó la búsqueda; la primera en aparecer fue la prisa apenas a tres pasos de una piedra; sintió vibrar a la pasión y al deseo en los volcanes; en un descuido encontró a la envidia y claro pudo deducir dónde estaba el triunfo. Al egoísmo no tuvo que buscarlo, el solo salio disparado de su escondite que en verdad era un nido de avispas, de tanto caminar sintió sed y al aproximarse a un lago descubrió a la belleza; la duda fue mas fácil de encontrar estaba sentada sobre un cerro sin decidirse dónde esconderse y así fue encontrándolos a todos; al talento entre la hierba fresca, a la angustia en una cueva oscura; pero el amor? no aparecía en ningún lugar; la locura lo busco detrás de cada árbol,debajo de cada roca del planeta y encima de las montañas, cuando estaba a punto de darse por vencida encontró un rosal y comenzó a mover sus ramas... entonces escuchó un grito doloroso, habían herido al amor en los ojos.
La locura no sabia que hacer para disculparse; lloró, rezó, imploró, pidió perdón y prometió ser su guia para siempre...
Es por eso que el amor es ciego y la locura siempre lo acompaña.
Sentimientos
5 Miradas :
Muy buen relato. Excelente.
El amor, el amor, el amor, que puedo decir yo, más que darle la razón, por propia experiencia se que el amor te vuelve loco, ciego, idiota, etc etc etc pero aun así se siento bien jejeje que masoquista, de lo peorcito.
Saludos y Besitos
ayyy que lindoooooooooooooooooooooo!!!!!!!! ves tonto????????? esas con las cosas que deberias decirme al oido jajajajajajajaja
Encantadora historia
Todo puede ocurrir. Tal vez, hay que aprender a jugársela por lo que quiere y aceptar las consecuencias de los propios actos.
Publicar un comentario