The Grey: Un día para sobrevivir

Una angustiosa, cruda y estremecedora historia acerca de la supervivencia y el enfrentamiento con la muerte. Infierno Blanco, o Un día para sobrevivir (en Perú), títulos limitados y directos que distan largamente del contundente y ambivalente The grey, título original, está basada en el relato corto “Ghost walker” escrita por el también co-guionista de esta producción, Ian Mackenzie Jeffers, quien junto al director Joe Carnahan son autores de la adaptación.

Ottway, interpretado por un siempre consistente Liam Neeson, cuyo trabajo con los años parece mejorar aun más, es un hombre que no tiene razones para vivir, sumergido entre el continuar con la agonía emocional y el suicidio. Trabaja para una refinería en Alaska como francotirador para liquidar a los lobos de la zona que significan un peligro para el resto de trabajadores, grupo de ex convictos y desechos sociales. Camino a casa, el avión no logra atravesar la tormenta y se estrella. Ottway y otros seis logran sobrevivir. Lejos de que sobrevivir a las condiciones climatológicas sea su mayor problema como en la recordada Viven de Frank Marshall, una manada de lobos salvajes se convierten en el verdadero peligro. El enfrentamiento entre las manadas, la humana y la canina obligan a Ottway en convertirse en el macho alfa de los sobrevivientes y medir su experiencia, habilidades y carencia de ganas por vivir, con la fortaleza salvaje de los animales, liderando este grupo humano en busca de un camino a la sociedad en donde puedan volver a estar a salvo.

Una de las escenas mejor logradas es aquella en la que Ottway encara y desafía a Dios clamando por una muestra de su existencia, una ayuda que le permita bajo sus propios esfuerzos poder sobrevivir.

Osada y cruda, The grey no termina de sorprender con una puesta en escena que funciona, con una fotografía, una edición y una banda sonora que contribuye con el suspenso y el miedo. El tema no es ambicioso, por el contrario, es simple: la sobrevivencia, sin embargo la soberbia actuación de Neeson y una dirección impecable, engancha y atemoriza.


Sin lugar a dudas una excelente película por ver.