
Para ser claros el aborto terapéutico ha sido aprobado y despenalizado desde 1924 en el artículo 119 del Código Penal, pero hasta la fecha, su aplicación no era considerada por no haber un protocolo para su procedimiento, siendo éste el motivo por el que cientos de mujeres han fallecido de la manera más absurda y por el que otras miles han sido obligadas a la tortura de ver a sus hijos sin posibilidades a una vida normal, corroborando que la calidad de vida en el Perú es un tema desapercibido, como el caso de María, quien apenas cumplidos los 13 años fue violada por un mototaxista durante cuatro meses embarazándola, intentó suicidarse lanzándose desde el techo de su casa y terminó con lesión cervical grave y la médula espinal partida en dos; necesitaba ser operada de urgencia, pero se lo negaron para no dañar el bebé que luego moriría en un aborto espontáneo, hoy está parapléjica y sin sensibilidad en el 90% de su cuerpo. O como el caso de Karen, que hace 9 años, cumplidos 17, el "apoyo" médico estatal la obligó a la tortura de mantener el embarazo de un feto que carecía de cerebro y cráneo, alumbrarlo y ver a los pocos minutos morir a su hijo...
En el 2001, Karen, después de una demanda
interpuesta al Estado peruano,
ganó el juicio en la Corte de DD.HH. de las Naciones Unidas