Israel y su gobierno en una enferma avidez política, pone por encima de miles de vidas, su interés por recuperar terreno y poder, con la excusa de un ataque irrisorio a comparación de la masacre que ha perpetrado de manera sistemática en la franja de Gaza, con el apoyo alucinado de un pueblo que con fe absurda y malsana, pretende, por ser judíos, excusar el genocidio con una postura fantástica como herederos de la tierra prometida, y del nefasto y asesino gobierno de George W. Bush.
La ONU demuestra una vez más la ineficacia de su presencia y la sinrazón de su existencia.