En todo el globo terráqueo contamos con un escaparate amplio y variado de animales; y no hablo de los protagonistas de Animal Planet o de los que vemos en algún zoológico, sino de aquellos que camuflados dentro de la especie humana hacen garbo de su poca sapiencia cuando gesticulan aquel músculo, que sabe Dios por qué lo tienen, que lejos de representarnos con inteligencia y cultura sólo corroboran la estupidez humana, la boca, provocando la incógnita del por qué hay especímenes, supuestos homo sapiens, que no respondieron al desarrollo normal de la evolución.
El 20 de enero pasado, Yolanda Vaccaro, periodista redactora, corresponsal de el diario El Comercio de Perú fue a cubrir el homenaje al reconocido chef peruano Gastón Acurio en el encuentro gastronómico Madrid Fusión. Como toda periodista, cuenta Vaccaro, ya se había adjudicado un espacio cerca al estrado con anticipación, para que con buen ángulo captar con su lente los mejores incidentes del espectáculo, cuando de pronto, una docena de fotógrafos, presurosos, se acercaron al estrado y comenzaron a hostigar a la peruana con el fin de amedrentarla y sacarla de donde estaba, "sal del camino!", a lo que ella contestó, como manifestó a su diario, "soy corresponsal de El Comercio; no puedo moverme, tengo que tomar fotografías para enviarlas al Diario". Acto seguido, 2 periodistas españoles la tomaron de los brazos y a empujones, la sacaron, "Vete a tu país, sudaca de mierda!"...